Entre los diversos tipos de tecnologías que existen, se estima que un poco menos del 50% de las empresas pertenecientes al sector transporte y almacenamiento emplean sistemas de planificación de recursos empresariales conocimos como ERP, según el Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad.
Este es solo un ejemplo de uno de los muchos que son empleados en la optimización de los procesos de los negocios. Uno de los recursos que más eficiencia produce para reducir la inseguridad y potenciar la mejora en la toma de decisiones, es el uso de redes que ayuden a prever la demanda.
El comportamiento del consumidor es complicado de determinar. El empleo de instrumentos que faciliten la gestión de esta tarea puede resultar de un extraordinario beneficio. En el ámbito logístico, contar con este tipo de método podría determinar qué política de aprovisionamiento usar, así como la organización y los flujos de las mercancías.
¿Qué son los sistemas de previsión de demanda?
Estas herramientas ayudan a planificar los procesos y combatir la incertidumbre que el mercado crea en la actividad logística. A través de ellas se establecen estimaciones que tienen en cuenta múltiples variables como las tendencias y el historial de ventas y de aquellos elementos involucrados en el comercio.
Las técnicas de planificación procesan y analizan datos que componen información esencial para el adecuado funcionamiento de la cadena de suministro. La posibilidad de definir estrategias mucho más precisas puede resultar una ventaja competitiva de gran valor en los negocios. Además, es de vital importancia entender, mediante información precisa, lo que los clientes desean adquirir de las empresas.
De esta forma, las compañías pueden predecir la demanda de las mercancías y comprender que posibilidades puede deparar el futuro, adelantándose a los acontecimientos. Gracias a estas prácticas podrían evitarse algunas problemáticas existentes en la industria como las roturas de stock, poseer los niveles correctos de existencias, tener una estrategia adecuada en el aprovisionamiento o planificar las necesidades del transporte con el fin de reducir sus costes.
El uso de la tecnología optimiza la labor logística y debe ser empleada correctamente para incrementar la rentabilidad del negocio. La revolución digital ha cambiado la actividad del sector y con ello los métodos que se emplean para la gestión del mismo. La facultad de disponer de una alta cantidad de datos a través del Big Data proporciona la oportunidad de conocer la situación actual y futura del mercado y de diseñar estrategias que ayuden a mejorar la toma de decisiones.
¿Qué metodologías de previsión de la demanda hay?
A la hora de utilizar estos sistemas, pueden recurrirse a diferentes tipos. Los más frecuentes se categorizan en tres procedimientos cuantitativos distintos:
• Modelo analítico basándonos en el historial de ventas. Con esta herramienta se buscan patrones que se repiten a lo largo de la cadena, relacionando datos en el proceso. Para que este análisis puede desarrollarse de forma correcta es imprescindible que se cuente con una base sólida en cuanto a datos pasados se refiere.
• Técnicas causales. Se trata de un análisis o cálculo más complejo que combina diferentes factores para determinar las previsiones futuras. Examina algunas variables como los ciclos económicos o las acciones y campañas de las empresas competidoras.
• Simulación a través de modelos dinámicos. Toma en consideración los agentes internos y externos a la compañía como el aumento y la disminución de los precios o los cambios en el volumen de envíos.
Cada una de estas metodologías emplea diversas operaciones matemáticas avanzadas. Sin embargo, son muchos los que todavía apuestan por métodos más tradicionales como las hojas de cálculo. Aunque con el avance de nuevas tecnologías como la Inteligencia Artificial, no podemos descartar que este escenario evolucione con el tiempo.
Beneficios de aplicar estos sistemas a la gestión de las empresas
Asimismo, contar con técnicas de previsión de la demanda presenta múltiples ventajas para las compañías que lo utilizan.
• Optimizar beneficios.
• Maximizar el inventario.
• Control de los costes.
• Diseño a medida de la oferta.
• Mejorar la organización y gestión del inventario.
• Anticiparse a los gastos futuros.
• Adelantarse a los posibles errores y riesgos en la cadena de suministro.
A lo largo de los últimos años, la supply chain se ha visto inmersa en una gran inestabilidad, provocando incertidumbre en la actividad logística, así como en la economía. Estas herramientas son clave para anticiparse a las posibles situaciones futuras y encaminar las acciones en función de dichas predicciones. Además de las múltiples ventajas que se han ido mencionando, contar con estos sistemas nos prepara para el panorama venidero, consiguiendo una estabilidad mayor en el conjunto de la compañía.